Toda la comunidad educativa pudo disfrutar de juegos típicos, degustaciones, desfile de trajes chilenos y diferentes tradiciones nacionales.
“Estamos muy contentos. Han participado gran parte de nuestros apoderados. La idea es que los niños aprendan cuáles son nuestras raíces”, sostuvo Johana Cuevas.
Los apoderados se reunieron por sectores para demostrar diferentes habilidades culinarias: El Tártaro, Piguchén, Guzmanes-Vicuña y Putaendo Centro.
Fue una hermosa jornada de este establecimiento que tiene actualmente 20 niños en Sala Cuna y 32 niños en Jardín.